¿Y qué significa? El viento en la naturaleza es como la energía en el cuerpo, existe en todas las estaciones. Podemos encontrar un ataque de viento en primavera, verano, otoño o invierno.
El viento es de naturaleza yang, tiene la capacidad de abrir los poros y espacios. Podríamos decir que es como un ladrón que abre las puertas y ventanas para que otros ladrones puedan entrar en la casa.
Cuando hablamos de: ataque de viento-frío, ataque de viento-calor, ataque de viento-sequedad y ataque de viento-humedad, en realidad estamos hablando de: ataque de frío externo, ataque de calor externo, ataque de sequedad externa y ataque de humedad externa.
La Medicina China utiliza la palabra «viento» como nombre genérico para designar cualquier ataque exterior.
Por ejemplo, en un ataque de viento-frío, en muchas ocasiones no hay viento, sólo hay frío, pero facilita el ataque de otras energías, al abrir los poros y dejar que entre la energía perversa.
El viento sopla, circula, es cambiante, por eso sus síntomas tienden a ser migratorios y a cambiar rápidamente en su curso.
Con frecuencia se asocia con trastornos agudos, enfermedades como alergias, inflamaciones, infecciones, y otros trastornos que involucran al movimiento como temblores, tics, espasmos musculares, parálisis,…
Por eso decimos que el viento es el precursor de todas las energías.